Finaliza el mes de junio y con la llegada de los calores estivales se pone fin al curso escolar, a la vez que la actividad municipal se ralentiza y prácticamente no se relanzará hasta la llegada de la Feria. Entonces comenzará un nuevo curso y una nueva legislatura política que contará con notables novedades. En orden de importancia, lo primero que hay que destacar es el hecho de que en los 178 años transcurridos desde que se creo la provincia de Albacete (en 1833), la Diputación provincial la preside un almanseño, Francisco Nuñez, el nuevo Alcalde de Almansa.
Jesús GOMEZ CORTES. Copyright-2011 A1R.
Un joven político que viene pisando fuerte y que va camino de batir record: con tan solo 28 años se convierte en el presidente de diputación más joven de la historia, a la misma edad que Mariano Rajoy lo fue en la de Pontevedra, pero además, es el alcalde más joven de Almansa en los 32 años de singladura democrática transcurridos desde 1979. (Conviene recordar que Virginio Sánchez fue elegido alcalde con 30 años y Antonio Callado con 41).
El tiempo dictará cual será el balance de su trayectoria política. Lo pertinente ahora es desearle suerte en las altas responsabilidades que le competen, pero hasta que se reactive el curso político a la vuelta del verano, no puedo dejar de valorar las primeras actuaciones planteadas en el primer pleno ordinario: rebaja de sueldos, reducción del número de liberaciones y, sobre todo, un cuidado exquisito en las formas, no sólo en el Pleno, sino en cuantos diversos actos públicos ha comparecido.
Ese respeto y cuidado por las formas es algo que la ciudadanía valora mucho y suele tener en cuenta a la hora de ejercitar su derecho al voto. En igual sentido quiero valorar el tono y el contenido de las declaraciones de Nicolás Campoy y Macarena Molina, -portavoces de “Malestar Almansa”- cuyo discurso merece ser atendido con interés y que el próximo
viernes, recibirán a los componentes de la marcha de los indignados que partió de Valencia y se dirige hacia Madrid. Un movimiento espontáneo que surgido en vísperas de las elecciones municipales y autonómicas, no remite y ya ha adquirido un protagonismo que convendrá evaluar a la vuelta del verano.
Hasta entonces, me sumo a las recomendaciones que ayer hacía mi amigo Fernando García en su columna: disfruten de la estación veraniega que nos permite gozar de calles y plazas y cultivar las relaciones sociales. Ya lo decía el poeta romano Horacio:“Carpe diem”, ¡Vive el momento!
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