PATRIMONIO / 1,5 POR CIENTO CULTURAL
Ha aparecido un aljibe (aún sin datar), cerámicas y pavimento romano, casquetes del siglo XVIII, cuatro niveles de bóvedas, monedas de los Reyes Católicos y vestigios prehistórico
- Los expertos consideran que el cerro en el que se sustenta el Castillo comenzó a estar habitado hacia el 1.500 a.C. y ha contado con presencia humana hasta el siglo XVI
LUIS BONETE / ALMANSA La Tribuna de Albacete
Tras nueve meses de intensos trabajos de intervención en el principal monumento almanseño, el Castillo ha comenzado a ‘hablar’ a entregar a los técnicos intervinientes en las obras muchos de los secretos que aún mantenía guardados desde hace miles de años. A pesar de que los expertos aseguran que «lo que mejor tenemos identificados son todos los elementos del siglo XV como los ojibales del alcaide Juan Pacheco» lo que sucede es que han aparecido muchas «cosas» que son anteriores a esa época y trabajan en estos momentos en su datación.
José Vicente Piqueras, arqueólogo interviniente en las excavaciones aseguró ayer que el elemento más significativo encontrado es «un hermoso aljibe de unos 150 metros cúbicos de capacidad, dotado de una canaleta que puede ser aliviadero o entrada; han aparecido losas muy grandes que podrían corresponder a un umbral que daría acceso al aljibe para poder sacar el agua», dijo.
A pesar de que ha quedado demostrado que en la reforma de los años 50 se excavó en el monumento, y de que todo estaba muy «revuelto», han quedado al descubierto muros del siglo XV que dan soporte al más antiguo con una antigüedad de más de 600 años. «Hemos encontrado ‘noticias’ de torres romanas; también cerámica romana y un trozo de pavimento romano, no en su sitio, pero muy significativo y hermoso».
Piqueras confirmó la veracidad de la ‘torre perdida’ y de toda la zona palaciega que en su día se interpretó en el Plan Director. «Han salido a la luz habitaciones y ambientes separados nunca antes conocidos». En cuanto a elementos más pequeños, Piqueras confirmó el hallazgo de monedas de la época de los Reyes Católicos, un buen número de catapultas de piedras, proyectiles, casquetes y munición del siglo XVIII. «Lo que más nos ha impactado es la confirmación de hasta cuatro niveles de bóvedas que demuestran la existencia aquí de un edificio imponente». También han aparecido restos prehistóricos que los técnicos adelantan que va a ser muy difícil de encontrar. «Estos hallazgos confirman definitivamente los trabajos del arqueólogo José Luis Simón que documento que en este cerro ya había presencia humana en la época de 1.500 a.C., es decir, en la época conocida como ‘del Bronce’. «Un poblamiento humano de la misma época que el del Cerro del Cuchillo pero más pequeño y que continuó hasta el siglo XVI».
ZONA. Joaquín García, arquitecto integrado en el equipo de trabajo de las obras del Castillo, aseguró, entre otras cuestiones que, «los trabajos confirman que lo que todos hemos conocido como patio de armas, efectivamente lo fue, pero en su última etapa; prueba de ello es la aparición en el norte de la fortaleza de elementos muy importantes de cimentación de edificios bastante grandes», dijo.
Indicó García que, «en toda la zona excavada hasta la misma puerta norte, aparecen vestigios de una serie de construcciones de distintas épocas; etapas, que la arqueología tendrá que aclarar, elementos todos que son la base del edificio que en esta zona del Castillo existió en su momento. No nos referimos a un torre roquera, sino a un edificio con todos sus componentes necesarios», dijo.
Respecto a las actuaciones que se llevan a cabo en este momento García se refirió a al derribo de la escalera de acceso a la Torre del Homenaje. «Estaba rota, agrietada y podrida de humedad y, a través de un procedimiento de anastilosis (técnica de reconstrucción de monumentos en ruinas gracias al estudio metódico del ajuste de los diferentes elementos que componen su arquitectura) se va a reconstruir de nuevo», aseguró. García informó que «las excavaciones en la zona palaciega han finalizado. Dejaremos todo previsto como ‘potencia arqueológica’ para futuras campañas», reseñó.
Toda la zona excavada va a a quedar tapada por una forjado suspendido de una plataforma, que será el piso del nuevo edificio, de modo que el visitante podrá bajar por unas escaleras a esa zona y presenciar todos los elementos que ahora están al aire libre.
Sobre la aparición de una grieta en el monumento, Joaquín García explicó que, «la misma se sitúa en una de las terrazas; no afecta al Castillo aunque ha sido asegurada para evitar desprendimientos. Se estudia la forma de atacar la misma con soluciones definitivas para la máxima seguridad», dijo.
DECLARACIONES
JOSE VICENTE PIQUERAS
«Hemos podido
confirmar la
existencia de una
‘torre perdida’ y
de toda la zona
del palacio»
JOAQUÍN GARCÍA
«El conocido
patio de armas sí
lo fue, pero
solamente en la
última etapa de
uso del Castillo»
“La grieta que ha
aparecido en la
terraza oeste no
afecta para nada a
la seguridad del
monumento”
“La zona excavada
quedará tapada
por un forjado
suspendido. Será
visitable a través
de unas escaleras”
Comentarios recientes