por Javier MACIA
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De compostura egipcia, erguido, valiente y melena al viento, anda mi Sr. Puigdemont, Lord de las Catalonias, refunfuñando por la Europa continental. Ávido de respuestas, confabulando aventuras y buscando adalides, que comulguen de su ferviente ardor independentista. Ha dejado, eso sí, todo un sequito, a manos, de la desalmada justicia Hispánica.
El hijo muerto de mi Sr., se llama “PROCES”, nada que ver con “PROMETEO”.
Los escuderos, están sujetos, en Extremera y otros rediles para delincuentes, de esta extensa tierra llamada España. Los acólitos indemnes, andan como pollos sin cabeza, los advenedizos “CUPernianos”, se preguntan si ya son independientes, y el resto de la hidalga ciudadanía, ha demostrado amar a España, sentir su tierra y tradición, y desembarcar con banderas por las calles de Barcelona, otrora , insigne ciudad Condal de las culturas Hispánicas. Hoy, y llegados al momento álgido del fraude, que supone un proceso mentiroso, fastuoso, fachoso y utópico, queda palmariamente demostrado que la preconizada republica independiente de mi Sr, es un aborto político, que no solo ha costado euros millonarios, sino relaciones interpersonales y familiares, que es cuasi más trágico. Por que los españoles, catalanes, gallegos, vascos, andaluces, e incluso los emigrantes en el extranjero, lo fueren de donde fuesen, siempre han sabido sobrellevar el aspecto económico de las crisis, pero han sido también más proclives, a resentir sus relaciones personales, cuando las ideas y las “éticas”, fueron parte de la disputa o el conflicto. Y eso, precisamente, es la marca indeleble que sustancia en estos días, la realidad de Cataluña, el efecto mariposa que está soportando la sociedad civil, fracturada y hundida, fruto de los mariposeos alegres, de ciertos avechuchos, que pretenden desde la política engañar al pueblo, para seguir enriqueciendo sus arcas de condestables burgueses.
Ahora bien, prez y loa, a quien sus principios define, y defiende. Mi Sr, nunca se sintió español, supo aprovecharse de tal circunstancia, cobrar emolumentos, desempeñar cargos, cuaresmar ideas y parir locuaces discursos mediáticos, en pos de una intentona secesionista, que siempre pensó, le otorgaría una página en la historia de un país que nunca sintió propio o por el contrario, escribir el primer capítulo, definitivo, de una nación ilusoria, que pudiera ser real. Toda una cruzada, todo un empeño y guion, de autentico “Quijote cervantino”. Y en esas está, cruzando de Cruzada Imperia, el antiguo continente, que fuera español y castellano hablase, ¡¡allá en Flandes, donde los Tercios y su Capitán Alatriste!! Mi Sr., ha perdido la cabeza, desvaría de testa, porque rumbo si conoce, el norte, las tierras Belgas. Se consideran oficiosamente monarquías federales precisamente a, Bélgica (hoy reino) y a este nuestro, España. Y ha perdido la cabeza porque siendo manifiestamente republicano, que no de izquierdas – merece la pena mencionar tal matiz- fue a refugiarse al presumible amparo de la jurisprudencia belga, que resulta un país tradicionalmente monárquico. Nimio detalle visto en superficie. Esta marioneta, que empieza a resultar mi Sr., pretende ahora en su gallarda soledad, aparecer con lista electoral unipersonal, como santo mártir, a unas elecciones fruto de la aplicación de la Constitución Española (Ley que vulnero dolosamente y a conciencia). Su esquilmada corte y sus feroces lanceros, al estilo Forcadell, comienzan a sentirse constitucionalistas, dicen ahora, que 155 razones son suficientes, escondiendo así su apriorismo, protegerse a ellos y sus bienes, reales y posibles, tras los comicios “ Rajoianos”, por si les fueran favorables. Todos bailan, todos comen, todos gozan, todos, unos en prisión provisional y otros fugados y al margen de la ley, y todos a cubierto, y pagados por intereses arbitrarios de capitalistas burgueses, que sueñan con una independencia, que los haga reyes de una Catalunya, grande y libre, ¡ qué paradoja! Serian los plebeyos de la CUP los sacrificados, los estafados, y con ellos el resto de catalanes.
Pero como bien dije al principio, esta no es la leyenda de Prometeo, aun que si se condicionara la entrega del becerro dorado, de la panacea bíblica, a un pueblo entusiasmado, mas por las penurias de la crisis, que por lo autenticidad de quien no la supo administrar. Este Prometeo liberado, aunque extraditable, nunca jamás podrá otorgar el fuego a su pueblo, este falso Quijote cobarde, no derrotara molinos de viento y mucho menos este Mi Sr Caballero, gozara de las glorias de ser mártir, al contrario, la vergüenza tendrá significado en las futuras paginas de la historia de este pueblo, que de nuevo salió a las calles a defenderse como único soberano. ARRIBA ESPAÑA.
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